La Tierra, la parte física y densa de nuestro mundo, de nuestra vida. Todo lo material, todo lo corpóreo, lo que se manifiesta en la «realidad» de nuestros sentidos, está en la Tierra. El dinero, la riqueza, los bienes materiales… todos ellos también son Tierra y es a este elemento al que se lo pediremos.
El elemento Tierra es el templo en el que habitan escondidos el resto de elementos.
Simbología del Elemento Tierra
La Madre Tierra sostiene nuestros cuerpos. Los árboles, las plantas, los animales, las personas… todos nos movemos físicamente en la Tierra. Su abundancia es nuestra abundancia, pues sin ella no existimos. Lo que ésta nos quiera dar es de lo que podremos gozar. Pedirle al elemento Tierra es pedir abundancia y riqueza en el plano físico, para también poder enriquecer el plano espiritual.
A veces nos sentimos mal por pedir riqueza o abundancia a nuestro plano material. Por ejemplo, nos cuesta pedir dinero o nos cuesta pedir una vida más plena a nivel material. Sin embargo olvidamos que el dinero bien empleado ayuda a que traslademos su valor al resto de planos. No consiste en amasar dinero o en acaparar riqueza. Consiste en vivir sin holguras y en poder poner lo material al servicio de lo espiritual.
La Tierra es un elemento femenino que nos ayuda a conectar con nuestro interior. Cuando la estación del elemento Tierra llega, el invierno, la Tierra nos protege bajo su superficie de las nevadas y las intensas temperaturas del exterior. Es también, por lo tanto, uno de los elementos más importantes de protección y de trabajo en el hogar. Nuestra semilla permanece protegida y aletargada, trabajándose y purificándose, a la espera paciente de que los rayos del Sol vuelvan a calentar la superficie para poder rebrotar con fuerza con la llegada de la primavera. Sin embargo no olvidemos que para poder renacer y crecer, antes debemos morir dejando nuestra semilla, nuestra esencia, bien protegida para que de ella volvamos a surgir.
El trabajo con el elemento tierra
No siempre es posible mantener los bioritmos de los elementos en el momento en que estos llegan. Sin embargo es interesante trabajarlos como es debido y usar su energía cuando notamos que llega su momento. La Tierra es un momento de trabajo interior, de reflexión y de recogimiento. La Tierra nos protege durante el tiempo de oscuridad, manteniendo nuestra esencia a salvo. No luches, no intentes florecer antes de tiempo cuando tu esencia se haya sumida en la sombra. Simplemente déjate sentir en la Tierra, vívela, siéntela, déjate llevar por ella y sal con fuerza cuando veas que la luz vuelva a brillar. Tenemos la tendencia a creer que debemos vivir siempre en la luz, pero somos seres duales que deben explorar también la oscuridad.
Como herramienta del Elemento Tierra se pueden usar varias cosas, pero mi favorita es usar algún tipo de mineral, cuarzo… Hay quien usa un péndulo, monedas (por la representación de la riqueza). También se usa la sal o arena para representarla en el altar
El color de la Tierra es el negro, por lo que si queremos realizar un ritual con ella usaremos una vela de este color y la pondremos hacia el punto cardinal Norte en el altar o en la habitación.
Correspondencias
- Atributos: protección, trabajo interior, riqueza y abundancia
- Color: Negro y verde
- Punto cardinal: Norte
- Estación: Invierno
- Energía: Femenina
- Herramientas: Mineral, cuarzo
- Elementales: gnomos